Hola azul.
Esta historia siempre me ha gustado mucho, gracias por recordarla.
Un abrazo.

Gran enseñanza en este video
Gracias por traerlo
las voces de los monjes ponen los pelos de punta
Namasté!

Gracias a ambos por vuestros comentarios:)Me pasa algo divertido con ambos, por vuestros nicks suelo confundiros:) aunque ya voy aprendiendo a diferenciaros:)

Creo que fué de las primeras cosas que mi compañero (el que me "presento" el zen, por primera vez), me enseñó: la ecuanimidad. Para mi, la tópica calma interior del monje budista, es un modelo de vida a conseguir. Las oscuridades y confusiones internas, no nos permiten a muchos, este tipo de vida. Creo que solo desde la limpieza interna (especialmente de las influencias, criterios, creencias, etc, sociales), podemos llegar a vivir el ¡Ah sí?. Vivir sin la locura interna, desde la ecuanimidad, debe ser la pura felicidad:)

Gracias de nuevo a ambos

Hola Flor, esta es una historia que siempre me impactó, la actitud del monje de total aceptación de las circunstancias que le tocan, es impresionante. ojalá podamos llegaar a vivir así, tendríamos una gran paz mental y como decís tú, pura felicidad.
Un abrazo.
Mónica.